Casi nadie es inmune a la magia de contemplar el océano a través de una ventana. Pero, ¿qué pasa si al gozo, la relajación, la calma de ese momento le añadimos una cocina que, de tan especial, puede mejorar nuestros estados de ánimos?
Respuesta fácil: mirar el mar está entre las cosas que mayores beneficios psicológicos nos brinda a los seres humanos, mas, si a eso le agregamos una comida tan extraordinaria como el íntimo lugar en que podemos probarla, tendremos garantizada una experiencia cuando menos asombrosa.
Con unos 15 meses de edad, Casa Mía Paladar tiene todos esos ingredientes y los sabe mezclar como pocos de los más de 860 restaurantes que existen hoy en La Habana. Ubicado en el primer piso de un edificio de la calle 1ra del Vedado, este negocio familiar cuenta solo con treinta puestos porque se ha propuesto ser un lugar pequeño con una comida grande, de lujo.
Según relata uno de sus dueños, Alejandro Tiá, "tuve que traer la mesa de comedor que tenía en mi casa para tener más sillas en el restaurante y ya no sé ni siquiera cuál es. Sin rimbombancias, hemos creado un oasis para los clientes que suben, sofocados por el calor de la calle, y encuentran un espacio climatizado, de cara a un paisaje idílico. Regalamos un despeje total. Otro mundo".
Asimismo, afirma el joven empresario que “nuestras dos cartas de triunfo son la vista y la comida. En Cuba lo difícil sería no cocinar con productos naturales porque aquí casi todo lo que consumimos viene directamente del campo. Pero, con lo que hay, por poco o mucho que sea, debemos innovar, sacar lo mejor. Ahí está el verdadero reto y así hemos logrado saber diferente, no parecernos a otros”.
A pesar de que muchos pensaron "que nos moriríamos de hambre porque no estamos en una planta baja y la competencia es gigantesca en esta zona", Casa Mía funciona porque "demostramos que si haces las cosas bien todos los días al final la gente lo agradece. A todo el mundo le gusta sentirse bien tratado mientras disfruta de un plato diseñado con exóticos sabores cubanos e internacionales".
“Tanto mi hermano, mi primo, que es el chef, y yo, que somos los propietarios, como el administrador, hacemos que el equipo trabaje cuidando los detalles y tratamos siempre de preguntarle al cliente cómo le fue, qué tal le pareció la comida o si cree que debemos mejorar en algo", resalta el también informático.
Uno de los clientes de Casa Mía comenta en TripAdvisor que "descubrí por internet desde España esta paladar y nos decidimos a ir en nuestro viaje a La Habana. Tengo que decir que todo fue perfecto: el recibimiento, la comida, el trato del personal. Sin dudas, el mejor lugar donde comimos y esperamos pronto volver".
En tanto, Mario Douglas, desde Francia, reafirma que "es de esos lugares al que puedes regresar mil veces y no te cansas: el ambiente, la atención, la calidad de los alimentos junto a su variedad, son algunos de los factores que provocan las visitas reiteradas. ¡Casa Mía Paladar es de mis restaurantes favoritos en MI HABANA!.
De acuerdo con lo que expone el emprendedor Alejandro, "aquí tenemos una carta con pocos platos, pero cada uno es un universo. A veces las personas ni entienden el nombre del menú, pero les explicamos en qué consiste y salen de aquí adorando nuestra cocina. Tenemos un entrante estrella que es el crepé de pollo con frutas naturales y pastas deliciosas como el risotto negro, que es súper demandado”.
Una de las líneas por las que se rige la prometedora paladar está enfocada en el público cubano. A tenor con Alejandro: "Yo diría que la mitad de nuestros clientes son nacionales porque nuestro servicio no hace distinciones. Aquí el cubano es tan bien tratado como un extranjero. Tenemos muchos clientes que vienen una y otra vez y eso es lo que más contentos nos pone: que la gente vuelva".
En palabras de Ofelia, se trata de "mi restaurante preferido en La Habana... No hay un plato que pueda recomendar porque TODOS son deliciosos”.
Otra cubana, Maylín, quien ha estado tres veces en Casa Mía Paladar, asegura que allí todo es perfecto. Cada plato llega “en el tiempo exacto a la mesa con un sabor fresco y maravilloso sobrepasando mis expectativas... Les recomiendo si van que no dejen de probar la langosta a la piña".
De igual forma, Ilda Elisa indica que fue "deliciosa" la comida que "probamos en este pequeño y gran restaurante a la vez. Bella vista del Malecón, baños limpios, cocina panorámica, linda decoración. Muy buen servicio de los dependientes. Delicioso ceviche con mango y cordero al estilo de la casa".
El sistema de reservas que usa el restaurante, convertido en uno de los destinos culinarios más populares de la isla, está diseñado para no hacer esperar a los clientes. Alejandro considera que "si reserva su mesa a las nueve, su mesa estará lista a las nueve. Si aquí alguien espera es porque llegó temprano. La idea es que la gente reserve para tranquilidad de ellos y de nosotros".
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NOTA: Usted puede hacer la reserva en Casa Mía Paladar desde este enlace e incluso puede invitar a su familia a comer y pagar la comida desde fuera enviándoles una Tarjeta de regalo / GiftCard