Para rendirle tan buen culto al medio milenio de existencia de La Habana como lo hace con la mesa, La Catedral se vestirá de galería de arte en noviembre próximo. La Ciudad Maravilla vista desde las distintas perspectivas de un lente fotográfico será el regalo del popular restaurante a los 500 años de la capital de la isla.
De acuerdo con el propietario de La Catedral, Diego, “tenemos el orgullo de compartir cumpleaños con La Habana. Abrimos en 2013, el mismo día en que esta urbe celebró su cumpleaños 494. No fue casualidad que naciéramos el 16 de noviembre, sino una elección consciente que hicimos para contagiarnos con la fuerza de la capital y seguir creciendo amparados por su encanto. Como constante fuente de inspiración la vivimos y recreamos desde nuestros fogones para quienes nos visitan.
“El propio nombre del restaurante hace referencia a lo primero que se fundaba en una ciudad que era su catedral. Por eso este año, en que se lleva a cabo una campaña tan grande y bonita alrededor del 500 aniversario y nosotros cumpliremos seis años, decidimos hacer un concurso de fotografía dedicado a La Habana”, explica el principal promotor del destino gastronómico ubicado en el Vedado.
Según precisan las bases del certamen La Catedral Habana 500, del 15 de mayo al 5 de septiembre de 2019 cada participante podrá enviar hasta tres fotografías en formato digital al correo catedralrestaurantecuba@gmail.com poniendo como asunto La Catedral 500.
Del mismo modo, las obras tendrán como temática “la propia ciudad capital con su multiplicidad de vida y su gente”. Los organizadores aspiran a que sean “fotos que retraten desde la inspiración los diversos paisajes que deja La Habana; que ubiquen a la gente que la habita en el centro de esa mirada, y que plasmen la diversidad de estampas de esta ciudad con cinco siglos de historia”.
En palabras del experimentado cuentapropista, “estamos esperando que lleguen de tres mil a cuatro mil instantáneas de fotógrafos de Cuba y el mundo, con el fin de hacer una pequeña selección que se expondrá en el restaurante durante un mes. El autor de cada foto finalista se encargará de imprimirla y de entregarla a La Catedral y nosotros correremos con su enmarcado.
“De esa selección, un prestigioso jurado elegirá la foto ganadora, a cuyo autor se le concederán 500 CUC, tantos como años tiene la ciudad. Se trata de un Gran Premio que no doy yo como dueño, sino que saldrá de la propina de nuestro colectivo de trabajadores que fue quien tuvo la idea de hacer algún evento que vinculara a La Catedral con La Habana. Es la manera de darle nuestro apoyo sociocultural a un sitio que es nuestro hogar”, destaca Diego.
Igualmente, las obras escogidas deberán ser impresas en papel fotográfico, con una medida de 40x50 cm. En un evento especial que se desarrollará el 15 de noviembre, víspera de la celebración conjunta de La Habana y La Catedral, se darán a conocer los resultados del concurso.
Por otro lado, durante el período de recepción de las obras el restaurante las irá compartiendo en sus redes sociales, para entregar el Premio a la Popularidad, que consistirá en 100 CUC y se le otorgará a la foto que más interacciones acumule, es decir, la que más alcance tenga en Internet.
A tenor con Diego, “el restaurante está en su punto máximo de maduración, de ahí que su mayor reto esté en sostener la fijación del cliente nacional e internacional. Aunque no lo parezca es el momento de no confiarse, de mejorar cada detalle, de revisarlo todo. Cualquier negocio que se estanque, corre el riesgo de empezar a decaer en cuanto a calidad y eso es lo que no queremos.
“Esa es la razón por la que nos mantenemos activos, siempre innovando. Con la comida cubana como locomotora, defendemos la fusión de una carta amplia en la que también se pueden encontrar exquisitos platos italianos, internacionales, chinos. Ojalá que la participación en el Concurso La Catedral Habana 500 sea igual de amplia porque eso nos prestigiará”, asegura el trabajador privado.