Rompiendo con las rutinas todas, te traemos en esta página la esencia de este verano condensada en un puñado de recomendaciones sobre lugares en los que disfrutar durante estas jornadas. Apropiados para escapar del calor o compartir entre amigos, para bailar o sentarse en un rincón, para el cóctel y la limonada, para ver el partido y escuchar baladas.
Estos son 7 bares en La Habana a los que debes echarle un buen vistazo.
La nota: Céntrico, novedoso, vital. Establecido justo encima de un restaurante de comida ligera extremadamente conocido, ofrece cocteles y tapas de cocina internacional en un ambiente moderno matizado por presentaciones en vivo de música cubana.
Lo bueno: Una carta que incluye más de 100 cocteles.
Lo malo: No hay realmente espacio para bailar y está en un segundo piso.
Lo recomendado: Definitivamente, los Gin Tonics.
La nota: Ubicado en la segunda planta de una casona neoclásica del Vedado, propiedad del cineasta Rafael Rosales, Madrigal encarna un estilo bohemio signado por la nostalgia de la Habana elegante y por la presencia permanente de obras de arte.
Lo bueno: La atmósfera sin duda, esa combinación entre decoración, música, tonos y medidas.
Lo malo: El servicio no es siempre de lo más amable.
Lo recomendado: Sentarse en el balcón.
La nota: Anexo a uno de los más reconocidos restaurantes de la ciudad, La Fontana. Tiene, siempre ha tenido a pesar de cambios de locación, su propia identidad. Un lugar especial, por la disposición de asientos y espacios, para los encuentros de amigos.
Lo bueno: Una atmósfera muy tranquila y una decoración muy atractiva.
Lo malo: A veces es difícil circular y el servicio se tiene que estirar bastante para cubrir todas las áreas.
Lo recomendado: Las Margaritas y sentarse cerca de la barra. También es un buen lugar para tomarse un trago cuando se está solo.
La nota: Construido desde los cimientos en un estilo más que moderno, localizado en una de las zonas más céntricas de la ciudad, Sarao's sigue siendo uno de esos lugares que sorprende y encanta y que a estas alturas no requiere muchas presentaciones.
Lo bueno: Una atmósfera enérgica, espacio y buena onda. Buena música para quienes quieren divertirse.
Lo malo: A pesar del bar bien surtido, los cocteles no son el mayor atractivo de la casa.
Lo recomendado: Este es un lugar para irse de fiesta con los amigos.
La nota: Controvertido a ratos, divertido en todos los casos, un lugar pensado para el divertimento llevado a su máxima expresión. Popular hasta la molestia, pues a veces se hace difícil entrar, todo el mundo sabe dónde encontrar a este Rey de la Noche.
Lo bueno: La atmósfera de fiesta interminable.
Lo malo: Ha sido sujeto de controversias por sus políticas a la hora de admitir clientes.
Lo recomendado: Irnos a King bar, todos los días. En realidad lo recomendado es aprovechar el juego de palabras al máximo.
La nota: Moderno y bien ubicado, Don Eduardo carga la mano en la selección de cocteles que ofrece a sus clientes, amén de una interesante propuesta de remodelación de una edificación de estilo colonial.
Lo bueno: La vista a la Plaza Vieja.
Lo malo: Si bien pareciera propicio para encuentros entre amigos, los espacios para ello no están del todo calculados.
Lo recomendado: Incorpórelo, amigo o amiga, a su rutina de conquista más calculada.
La nota: Este tampoco es un café. Seamos sinceros, nada que permanezca abierto toda la noche lo es y el Corner, menos que nada. Reconocido por sus presentaciones en vivo, es un espacio para entretenerse sin límites.
Lo bueno: La música en vivo.
Lo malo: El ambiente parece mantenerse igual de enérrgico a toda hora, con o sin clientes, así que pasarse en la tarde a tomar algo y conversar con un amigo no es necesariamente una buena idea.
Lo recomendado: Pida los cocteles, la cantina, en general, es bastante buena.